
Para recuperar la solvencia financiera tras la contingencia, los negocios deberán digitalizarse, adoptando un esquema apoyado por las tecnologías de información y comunicación.
Para recuperar la solvencia financiera de las empresas e instituciones, tanto en iniciativa privada como pública, dañada por la pandemia originada por el virus SAR-CoV2, los negocios deberán implementar buenas prácticas administrativas, previendo una recuperación rápida.
El regreso progresivo a las actividades empresariales tras la emergencia sanitaria, es la oportunidad ideal para hacer una correcta planeación de los procesos internos con los que cuenta la empresa o institución.
Es fundamental hacer un balance de la situación financiera y contable en la que se encuentra una empresa o institución, sin importar su tamaño, ya que, de esta manera, se tendrá claridad en qué términos de salud financiera se encuentra.
Para ello, es necesario implementar medidas que permitan afrontar este problema:
- Estructurar bases para ajustar las cuentas por cobrar a su valor neto, ponderando la probabilidad y monto de incobrabilidad.
- Revisar las condiciones de operación de los activos, evaluar el deterioro de estos y la posibilidad de venderlos, los beneficios futuros o las pérdidas que generarán al venderlos a su valor de mercado.
- Considerar gastos extraordinarios.
Aunado a retomar el buen control de las finanzas, es indispensable que las empresas cuenten con infraestructura necesaria para seguir operando de manera remota; así controlan y automatizan sus procesos administrativos y contables en cualquier momento y lugar, acceden de inmediato a información el negocio y tomar decisiones acertadas frente a la problemática.
La pandemia ocasionada por el virus SAR-CoV2, que actualmente estamos viviendo, no solo dañó el ámbito de la salud, sino que ocasionó un daño fuerte en el sector empresarial, y, con ello, a la población, afectó las finanzas de manera negativa y los resultados se comienzan a ver después de un año; por ejemplo, el desempleo y aumento en los precios de productos a partir de primera necesidad. Por lo tanto, se debe poner en práctica medidas administrativas estratégicas con ayuda de las tecnologías de información y comunicación, eficientes para revertir el daño y poner en funcionamiento al sector empresarial base de la economía social actual.